El término criptomoneda se ha vuelto popular muy rápidamente en los últimos años. Al principio costaba comprender sus características y funcionalidad, incluso causaba temor en las personas. No obstante, ahora es más común y sigue extendiéndose gracias a las ventajas que proporciona con respecto a otros instrumentos, como la tarjeta de crédito.
El principal beneficio de las criptomonedas, entre las que destaca el Bitcoin, es la seguridad que se obtiene gracias a la tecnología blockchain. Entre las características que han promovido su expansión hay que mencionar:
– No se pueden falsificar
Las criptomonedas son digitales y el remitente no puede falsificarlas o revertirlas de manera arbitraria. Esto impide que se realice algún tipo de fraude con la moneda.
– Brindan liquidación inmediata
Su naturaleza no involucra a terceros, retrasos ni pago de tarifas, pues actúa como una gran base de datos de derechos de propiedad. En ocasiones, los contratos con criptomonedas se pueden diseñar y aplicar para eliminar o agregar aprobaciones de terceros, hacer referencia a hechos externos o completarlos en una fecha futura.
– Ofrecen cargos más bajos
Generalmente no hay tarifas de transacción para las transacciones con criptomonedas porque son compensados por la red. Aunque no hay una tarifa de transacción, muchos esperan que la mayoría de los usuarios contraten un servicio de terceros para crear y mantener sus billeteras.
Estos servicios actúan como Paypal para los usuarios de efectivo o tarjetas de crédito, proporcionando el sistema de intercambio en línea y es probable que cobren tarifas.
– Impiden el robo de identidad
La criptomoneda utiliza un mecanismo de inserción que permite que el titular envíe exactamente lo que desea al comerciante o destinatario sin más información sobre sus datos financieros ni personales.
– Son accesibles para todos
El mercado de criptomonedas da acceso a quienes no pueden optar al mercado tradicional. Esto significa que cualquiera con acceso a internet cuenta con la posibilidad de obtener criptomonedas.
– Se administran de forma descentralizada
Una red global de computadoras utiliza la tecnología blockchain para administrar conjuntamente la base de datos que registra las transacciones de criptomonedas; es decir, son administradas por su red y no por ninguna autoridad central. La descentralización significa que la red opera de usuario a usuario (o de igual a igual).
– Tienen reconocimiento mundial
Dado que la criptomoneda no está sujeta a los tipos de cambio, tasas de interés, cargos de transacción u otras cargas de ningún país, se puede utilizar a escala internacional sin experimentar ningún problema.
Esto, a su vez, ahorra mucho tiempo y dinero por parte de cualquier negocio que de otro modo se gasta en la transferencia de dinero de un país a otro. La criptomoneda opera mundialmente y, por lo tanto, hace que las transacciones sean bastante sencillas.
A pesar de sus notables ventajas, las criptomonedas tienen un largo camino por recorrer antes de reemplazar a las monedas tradicionales como una herramienta para el comercio global. Hace falta educar a las personas al respecto para poder aplicarlas a sus vidas y las empresas deben comenzar a aceptarlas.
El atractivo futuro de las criptomonedas reside en permitir un control total sobre tu dinero, con transacciones globales seguras y rápidas, y tarifas de transacción más bajas en comparación con todas las monedas existentes.
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